San Antonio de Padua, nuestro patrón, ha vuelto a congregar a los cubillejanos en torno a esta festividad, con una notable participación en los actos programados por nuestro Ayuntamiento para festejar la tradicional fiesta.

El sábado día 10, con un día espléndido de sol a pesar de las tormentas y lluvias de este mes de junio -que, dicho sea por otra parte, no han servicio para arreglar la desastrosa cosecha que se espera este por la sequía- nos reunimos en la plaza en torno a la mesa unos 120 cubillejanos para disfrutar de un almuerzo en compañía, sana diversión y donde reinó, una vez más, la alegría y la amistad, celebrando el reencuentro entre los vecinos del pueblo y los que llegan desde otros puntos de la geografía nacional.

Después del fin de semana, el día de San Antonio, el 13 de junio, también se continuó con las celebraciones religiosas y lúdicas. Primero la misa y la procesión con el santo, incluyendo una  bendición de los campos, como era tradición en el pueblo.

Tras la procesión, el Ayuntamiento organizó un vermut para todos los asistentes, unos sesenta después de que otros muchos tuvieran que regresar a sus lugares de residencia el domingo a cumplir con sus obligaciones. En este caso en el bar, de la mano de Madalina y Adrián, se organizó el vermut acompañado de tapas de todo tipo y acompañados por una charanga que animó a todos los cubillejanos en una buena jornada de diversión y fiesta.